sábado, 14 de abril de 2018

Menos "pilla-pilla" y a pensar en la economía

Está ya en tela de juicio hasta el título de Rey de Felipe VI. Y no es broma, ni un hecho increíble, pero gracias al "desliz" de Cristina Cifuentes, ahora nadie ha estudiado o terminado sus carreras ni grados. De ahí que Esperanza Aguirre por ejemplo se alegre de no tener ni un máster: "Aguirre: 'menos mal que yo no he hecho ningún máster'". Es triste que llevemos tanto tiempo abrazando la opción de tener carreras, másteres, doctorados, etc. y que ahora todo se haya convertido en una broma pesada y de mal gusto. Igual se pone de moda no tener nada, aunque el CV explote de conocimientos no buscados, ni encontrados.

Por eso, ya que cualquiera puede ahora jactarse de tener todo y de no saber nada (bueno, sí, al menos, de saber fingir para que no se note la posverdad), creo que estamos cayendo en un error. Mientras nos preocupa más si un político tiene o no un estudio superior (y de ahí el descubrir que son muchos los ingenieros y los licenciados en derecho, matemáticas, etc. que ni han pisado sus clases ni el temario conocen), estamos dejando de lado lo verdaderamente importante: nuestra economía y nuestra política.



Todos los partidos preocupados por sus "expertos" en temas no estudiados y los españoles siguiendo de cerca al PIB, a la deuda pública, a los impuestos, etc. ¿Por qué somos los únicos que seguimos pensando en lo importante y no nos dejamos llevar por las pullas que se están empezando a poner de moda en España? Porque, nuestros queridos políticos siguen siendo muy expertos en estudios de ciencias, en grandes ingenierías, etc., pero siguen sin aprobar lo único que ahora más necesitamos: el saber sobre economía. Y no nos vale un máster en economía por la Universidad Rey Juan Carlos, porque con este error público, ya podemos comprobar que ni los estudios tienen por qué ser válidos y ni siquiera conocidos.

Políticos, economistas, expertos que formáis parte de algún partido político, dejad de jugar ya al "pilla-pilla" y empezad a tomaros en serio la realidad. Que para saberla llevar no hace falta estudiar, solo pensar.